El presidente de Colombia

Por: Hernán Baquero Bracho.
Colombia tenía más de veinticinco años de no tener un Presidente tan claro, preciso, de valor y coraje. El Presidente Álvaro Uribe Vélez, llegó para fortuna en tiempos apocalípticos como un mensajero del bien. A poner orden, como la ha venido haciendo en todas las áreas, a limpiar el país de alimañas que han traído muerte y desolación, y esto lo está cumpliendo de manera inteligente, y de manera frontal. Esta Colombia que se encuentra desencuadernada por los males que se han sembrado en ella: corrupción, narcotráfico, clientelismo, nepotismo, violencia, hombres de doble moral, falta de patriotismo, falta de justicia social y poco sentido de pertenencia de un País tan bello y tan rico como es el nuestro.

Dicen los expertos que no es bueno mirar por el retrovisor. Pero yo aquí voy a echar una mirada a la historia de los últimos cinco presidentes: Turbay Ayala, tuvo carácter, coraje, pero le faltó capacidad. Belisario, fue un presidente retorico, ambiguo y dialectico. Gaviria, acabó con el campo, con su tesis desbordada de la mal llamada “Apertura Económica”. Samper, ganó las elecciones con supuestos dineros del narcotráfico, en lo social fue excelente pero muy permisivo en todo, casi acaba al País y Pastrana fue un mandatario pusilánime, frívolo; su presidencia me hizo recordar al inútil, una novela de un canal de televisión que vio todo el País. Lo bueno de él fue la recuperación de la deteriorada imagen de Colombia. Excelente relacionista, mal Presidente.

El Presidente Álvaro Uribe Vélez, ha cambiado la historia política del País en los últimos tiempos, producto de ello es que el pueblo Colombiano lo ha elegido en dos oportunidades con una abrumadora mayoría. Producto de su profesionalismo, de su carácter, de su personalidad y de su sinceridad con que ha enfrentado los problemas de nuestro País y han hecho de él a uno de los pensadores más brillantes que ha tenido Colombia en los últimos tiempos. Álvaro Uribe Vélez es y será el mejor guardián de la heredad de la nación entera, en todos los menesteres que tengan que ver con los intereses que afectan a nuestro terruño.

Álvaro Uribe Vélez está posicionado como uno de los mejores Presidentes que ha llegado con la mayoría absoluta del pueblo Colombiano. Colombia puede sentirse orgullosa de que tiene Presidente. Él encarna los intereses de Rafael Núñez, de García Márquez, del Negro Robles, de Pedro Castro Monsalvo y de Luis Carlos Galán. Nuestro Presidente es el futuro hoy. Su incidencia en los grandes cambios que ha tenido Colombia en los últimos ocho años así lo confirman. Su proyección en el modus vivendis y su defensa y victoria en la política de la seguridad democrática le han dado los mejores augurios de carisma y simpatía por el presente y futuro de nuestra patria Colombiana.

El Presidente de Colombia sigue demostrando que tiene capacidad y autoridad para manejar a un país tan convulsionado como el nuestro, de allí su preeminencia en el concierto de las regiones de la nación. Las grandes realizaciones son el fruto del esfuerzo arduo y del tenaz empeño; La senda del facilismo solo conduce al tobogán de errores y desatino frustráneos. De allí que no nos deben desalentar los reveces y las dificultades, unos y otros constituyen solo un reto, no un valladar infranqueable. Las más hermosas epopeyas de la historia han sido fruto de optimismos. Las hazañas épicas no han sido un canto al derrotismo. No. Tampoco puede ser la nuestra una actitud apática y contemplativa. La cámara de representantes, estamos seguros que aprobará el proyecto del referendo, para el tercer mandato de nuestro exitoso presidente. El referendo es el camino, es el horizonte donde continuaremos viendo un nuevo amanecer. Por el bien de la patria, el referendo marcará nuevamente la historia. Para continuar recuperando la dignidad, el respeto y el decoro de la sociedad Colombiana. No hay otro camino. Aplausos para usted Presidente. ¡Que así sea!

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